domingo, 18 de septiembre de 2011

Vacaciones fiscales vascas, o cómo expoliar al vecino castellano (II)

Por Javier Martínez.

El pasado 28/07/2011, tras 17 años de pleitos, se conocía la sentencia del Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TUE), con sede en Luxemburgo, que declaraba ilegales los incentivos fiscales vascos de los años noventa, más conocidos como ‘vacaciones fiscales vascas’ y cuya historia es un cúmulo de despropósitos y vergüenzas políticas y económicas, que nadie ha denunciado con toda la contundencia que merece por su gravedad, y por los daños y perjuicios causados a Castilla, principalmente.
La Corte de Luxemburgo, cuyo fallo es inapelable, declaró ilegales las llamadas vacaciones fiscales que las haciendas vascas ofrecieron a unas 300 empresas a través del impuesto de sociedades. La justicia europea cerró así, definitivamente, el largo litigio que desde 2000 mantenían la Comisión Europea de un lado y las tres Diputaciones forales del otro.
El Tribunal de Justicia de la UE calificó, a las vacaciones fiscales de 1993 a 1996, nada menos que de “ayudas estatales incompatibles con el mercado común” y, por lo tanto, deben devolverse, como solicita el Ejecutivo comunitario.

Dichas vacaciones fiscales consistían en una reducción gradual durante 10 años de la base imponible del impuesto sobre sociedades y el crédito fiscal del 45% a las nuevas inversiones superiores a los 15 millones de euros en activos fijos materiales nuevos a cualquier empresa que tuviese un capital social de 120 mil euros o un mínimo de 10 trabajadores (en la práctica, casi cualquier pyme), y cuyo objetivo era, como ha quedado demostrado, por un lado, dotar de ventajas competitivas ilegales a las empresas vascas (de ahí lo de ‘incompatibles con el mercado común’) y por otro succionar a los vecinos, directos o lejanos, el mayor número de empresas e iniciativas empresariales nacientes posibles, es decir, incentivar la deslocalización empresarial hacia territorio vasco de forma ilegal, ya que en la práctica suponía convertirse en un paraíso fiscal durante al menos 10 años.

Lógicamente esto es un expolio empresarial y fiscal para el resto de territorios europeos (las empresas españolas no vascas competidoras de esas 300, al tener unos costes impositivos mayores, venden menos, y la hacienda española, que recauda en el territorio de régimen común, donde están todas las CCAA en que se troceó a Castilla en la maldita Transición, recauda menos por ello), pero muy especialmente para la parte de Restospaña que linda con Vasconia, y que no es otra que Castilla, ya sea por su frontera santanderina, burgalesa o logroñesa (me niego a utilizar los términos ‘cántabro’, por ser un falso histórico resucitado en la Transición que obvia que La Montaña es la cuna de Castilla, y ‘riojano’, por  lo mismo, no todas las comarcas logroñesas son Rioja, por mucho que en esa misma época se decidiera renombrar a la provincia, y anular la personalidad de la Tierra de Cameros, la Sierra de la Demanda, etc.) ya que son quienes más descarnadamente han sufrido la deslocalización, la competencia desleal, y el consiguiente expolio empresarial y fiscal.
Político separatista vasco (no confundir con vascos) y/o político sucio-listo español, adoctrinando a su grey.
Ante el Tribunal de la UE, el Abogado del Estado español, que participó por primera vez de forma independiente y voluntaria en una vista ante la máxima instancia judicial europea, decidió actuar defendiendo a las diputaciones vascas que han expoliado fiscalmente la Hacienda española y empresarialmente a las regiones vecinas a Vasconia, dejando a éstas indefensas y alegando, para mayor caradura, que lo hacía 'por la indefensión de las diputaciones vascas' cuya defensa realizaron conjuntamente. El Estado defendió a su propio expoliador, dejando a Castilla sin defensa a sabiendas, y perjudicándose a sí mismo, simplemente porque al PSOE de Zapatero le convenía el apoyo del PNV.
Y lo peor es que esas ‘ayudas’ ilegales, no perdamos de vista el detalle, son “ayudas estatales”, esto es, con consentimiento del Estado. El Estado actuando como colaborador necesario, por omisión, por dejación de sus funciones, en el expolio de Castilla, y claro está, de todas las regiones del régimen común por alejadas de Vasconia que estén.

El Estado se dejó expoliar fiscalmente por una parte de su territorio, el vasco, y eso, sin explicación económica, si la tiene política. Zapatero necesitaba mantener el apoyo del PNV, y ese pacto lo pagamos, entre otros españoles, los castellanos, como siempre que no hay mayorías en Moncloa. Recordemos aquí, que Felipe González sí recurrió esa discriminación, y Aznar también. Fue Zapatero (y todos los socialistas castellanos incluidos por no rebelarse), natural de Castilla y León, quien por exigencias del siempre desleal, traidor y chupasangre PNV, nos malvendió, el muy malnacido, al retirar los recursos judiciales. Y ha sido por ello la Comisión europea, quien nos ha defendido, no España, nuestro propio país, como nos hubiese gustado. ¿Va a salirle gratis al PSOE? los culpables ni se ruborizan, nadie dimitió… y muchos de ellos incluso van a volverse a presentar a las próximas elecciones ‘para pedir la confianza’ de los castellanos, para erigirse en ‘representantes’ de éstos. Caraduras.

La reacción a esa traición, fue una cascada de denuncias (hasta once recursos aún siguen pendientes de sentencia) por los ejecutivos de dos de las tres regiones castellanas limítrofes con Vasconia, Castilla y León y La Rioja, ambas gobernadas por el PP, no así de Cantabria, cuyo presidente, el botarate Revilla, del PRC, al que frecuentemente se le llena la boca con la palabra ‘Cantabria’, gobierna con el apoyo del PSOE, y antepone su sillón, a su región.

¡Para que luego digan que no sirven las autonomías! Más servirían aún, si las tres provincias implicadas hubiesen formado parte de una misma CCAA, de nombre Castilla a secas, por una cuestión bien sencilla. La unión hace la fuerza, consigue que te respeten, te haces valer, no te ningunea nadie, en definitiva, sales de la irrelevancia y postración política y económica actual. Que nadie lo dude, una Castilla reunificada, del Cantábrico santanderino a Sierra Morena, no sería el erial decadente actual. Zapatero no se hubiese atrevido, cosa que sí ha hecho con las tres pequeñas autonomías. Y no olvidemos que esa unión castellana, tiene, además, lógica geográfica e histórica innegable.

Obsérvese que en la sentencia habla de “ayudas estatales”, es decir, que el Estado español lo ha consentido por negarse a recuperar el dinero incluso habiendo sentencias europeas que le obligaban, por lo que también es condenado… y de ahí la multa que nos pone, que habremos de pagar todos los españoles, y que más tarde  comentaremos.

La sentencia, difundida por la agencia Europa Press, desestima todos los recursos de las tres haciendas vascas y zanja el conflicto dando la razón a la Comisión Europea. Los representantes de las Diputaciones han explicado que acatan la sentencia, aunque discrepan de las consecuencias que acarrea. Dicho con otras palabras, acatan porque no les queda otra, pero siguen erre que erre, sin admitir que actuaron ilegalmente. Si los tribunales fuesen españoles, no les quepa la menor duda que se hubiesen pitorreado del fallo, y que incluso el gobierno español, como acostumbra, hubiese maniobrado con los jueces para darles la razón.
Polígonos industriales castellanos como los de Miranda de Ebro, Burgos, Logroño, Castro Urdiales, etc. fueron objetivo de la 'succión empresarial' vasca... y todo ello con el beneplácito del PSOE de Zapatero, no así de Felipe González (PSOE) y Aznar (PP) que recurrieron desde el inicio las 'vacaciones fiscales'.
Álava y Vizcaya, ahora en manos del PP y del PNV, respectivamente, han asegurado que el fallo judicial no tiene efectos prácticos, ¡chúpate esa!, puesto que las ayudas ilegales ya han sido devueltas por las empresas beneficiarias. Si hubiesen sido devueltas, digo yo, que es porque alguien se las ha pedido puesto que voluntariamente nadie devuelve un duro, cosa que no ha sucedido, lo que en la práctica significa que se reconoce que no se tenía razón en el juicio, por lo que ¿qué sentido tenía entonces seguir pleiteando?, ¿no será que no se han devuelto? Bildu, que controla la Diputación guipuzcoana desde hace escasos días, se ha desvinculado de este asunto, lavándose las manos, al recordar que se ha juzgado “la gestión de otro partido”, en alusión al PNV (pero también, suponemos, del PSE-PSOE), partido que gobernaba cuando se aprobaron. Implícitamente se reconoce que eran ilegales, o quizás aprovechen la ocasión  para lanzarle una puya al PNV, su rival por el mercado electoral más anti español. Cabe preguntarse, ¿si el pleito hubiese sido entre España y las tres diputaciones, habrían aceptado la sentencia, o habrían despotricado contra la ‘opresora Madrid’ al tiempo que desplegaban todo su arsenal más ultranacionalista? Pregunta idiota cuando la respuesta es obvia. Y ¿cómo se van a recuperar esos dineros si la agencia tributaria española ni tiene una oficina en Vascongadas, ni ejerce control directo sobre los impuestos?, ¿nos fiamos, por ejemplo, del PNV y Bildu?

La Comisión europea no. Según informa Efe, y reproduce ABC el 29/07/2011, “las Diputaciones de Álava y Vizcaya aseguraron ayer que ya han recuperado el dinero de las ayudas. De hecho, la segunda de ellas da cifras; 96,3 millones de euros, más 38,5 de intereses. Sin embargo, la Comisión no lo cree así y ha interpuesto una demanda que no se resolverá hasta la segunda mitad de 2012”.

O sea, más pleitos todavía, y todo ello, recordemos, con origen en un planificado expolio vasco a sus vecinos y una traición del gobierno de España a la parte más leal del país. La Comisión calcula entre 500 y 700 millones de euros la cantidad a devolver. Esa es la cifra de la broma zapateril.

Pedro Sanz, presidente de la diminuta y ninguneada regioncilla riojana, ya advertía el 24/11/2011 en El Mundo.es, con razón (ver noticia original aquí), cómo terminaría todo esto y el porqué sucedía: 'las vacaciones fiscales vascas las acabaremos pagando entre todos los españoles por no haber cumplido las sentencias legales [...] me siento más apoyado por Europa que por el propio gobierno [español] [...] Zapatero es el único que no ha puesto ningún recurso, discriminando a otras regiones [...] Zapatero se muestra reticente porque el PNV está por el medio' dijo tras lamentar el pacto PSOE-PNV. Pero estas cosas no solo ocurren porque cíclicamente tengamos en Moncloa un mindundi que nos malvende por unos votos a 'nuestros' insaciables peris. Ocurren también, porque los dirigentes castellanos de ciertas 'regiones', prefirieron en la Transición, ser cabeza de ratón a cola de león, pensaron en su interés personal, en cuantos más sillones mejor, y apostaron por trocear a Castilla y dejarla desvalida, sin fuerza ni pulso ni capacidad real de defensa. Y así nos luce el pelo ahora, señor Sanz. Una Castilla unida no sería tan fácilmente expoliada por los peris, ni abandonada a su suerte por el gobierno español de turno. ¡Menos mal que estábamos en Europa!
Por su parte, el ministro socialista de la Presidencia, el vasco Ramón Jáuregui, hizo, el 28/07/2011, un llamamiento para “cumplir con la sentencia de manera irrevocable” y “devolver” las cantidades que reclaman las instituciones europeas. Pero, ¿hay o no hay que devolver las cantidades expoliadas?,  ¿no decían las diputaciones que ya habían sido devueltas?, ¿quién miente?

Según publica El País.es, periódico no precisamente de derechas ni menos aún castellanista, el 28/07/2011 (ver aquí enlace a la noticia):

“Tras este fuerte varapalo a las instituciones vascas, inapelable en los tribunales, la controversia se centra ahora en la devolución de las ayudas irregulares, que se concedieron en Vasconia [nótese que, dado que escribo en castellano, no caigo en la estúpida concesión de escribir ‘Euscadi’, de intercalar palabras de otro idioma, sea vascuence o catalán, como si hace la acomplejada prensa de izquierdas española, a la que repele todo lo castellano porque lo creen carca, derechil, franquista incluso, y cosas peores].

Bruselas ha abierto otro procedimiento para imponer una sanción [a España] que supera los 40 millones de euros por no haber recuperado las cantidades otorgadas a las empresas [tal y como le exigió en 2001,  lo que prueba que nunca hubo voluntad de recuperar el dinero por parte del Gobierno español ¿Ven cómo no se había devuelto la pasta?, ¿ven cómo no son de fiar las haciendas vascas?, ¿no es esto una prueba más de las trampas que hacen en otro tema como el cupo, que un servidor, en línea con Roberto Centeno, defendía en el siguiente artículo?].

Según Bruselas, las empresas han devuelto una parte ínfima de los más de 700 millones que se otorgaron en conjunto, entre vacaciones, mini vacaciones y el crédito del 45%, mientras que las Haciendas vascas insisten en que todo el montante está reembolsado. Las autoridades comunitarias tienen la sospecha de que las Diputaciones del País Vasco podrían no estar jugando limpio en este asunto [¿y en el del cupo vasco sí?], a la vista de la falta de transparencia con que han actuado hasta ahora y las trabas que han puesto en todo este proceso”.

Según informa Libre Mercado.com el 28/07/2011 (ver noticia original aquí) “además, la Comisión ya ha pedido una multa a España por no haber recuperado ya la totalidad de las ayudas pese a que ya existe una sentencia condenatoria del Tribunal de Primera Instancia. La sanción ascenderá al menos a 40 millones de euros y seguirá aumentando cada día que pase sin que se reembolsen las subvenciones”.
Obviamente, como los castellanos somos parte de España, nos corresponde pagar la parte proporcional de esa multa. Es decir, que nos expolian empresarial y fiscalmente y encima nos condenan a pagar una multa. Gestión socialista en estado puro.
Pregunta del millón, ¿por qué España no exigió a las tres Diputaciones el pago y no acató la sentencia previa? Pues por lo de siempre, no había intención de recuperar lo expoliado por un 'problema' político personal o de partido, porque el inquilino de turno de la Moncloa, cada vez que necesita apoyos parlamentarios de otros grupos por carecer de mayoría suficiente, echa mano de la cartera de los restospañoles y paga, gustosamente, a traidores, se llamen PNV o CiU. Y esto lo hacen, por igual, PP y PSOE, no lo olvidemos. Nos malvenden, somos moneda de cambio, dan nuestro dinero a cambio del apoyo político a unas siglas que no nos representan, que solo piensan en el interés personal y partidista.
La propia sentencia deja claro el colaboracionismo de las autoridades españolas en el expolio vasco, insisto, a Castilla y demás regiones españolas de régimen común, pero particularmente a las tres provincias de Castilla la Vieja limítrofes con Vasconia.
Así, durante la vista oral del juicio, celebrado en Luxemburgo el 10 de mayo de 2011, las nunca leales diputaciones vascas, prosigue la noticia “alegaron que la Comisión nunca comunicó a las autoridades vascas, antes de la adopción de los regímenes en cuestión, ‘ni una sola duda’ en el sentido de que pudieran ser ilegales. Al contrario, mostró una ‘actitud favorable’. El tribunal de Justicia desestima este argumento y señala que la ‘inacción’ de la Comisión durante el período comprendido entre 1996 y 2000 no podía interpretarse como una aprobación presunta de la ayuda, habida cuenta de la falta de notificación a la Comisión de los regímenes de ayudas y de la falta de colaboración de las autoridades españolas”.
Más claro agua, el gobierno español, a sabiendas de la ilegalidad de las subvenciones y del expolio empresarial y fiscal que sufría su propia hacienda en el territorio no foral, calló porque no quería molestar a sus ‘socios’ políticos, y no colaboró con la Comisión. Esto es a mi juicio muy grave, traición. Y como es habitual en este país, nadie se ruboriza, nadie dimite ¿Necesitamos o no urgentemente una ley de responsabilidades políticas?
“En segundo lugar, el TUE considera que el Tribunal de Primera Instancia no violó el derecho a un proceso justo ni las normas procesales en materia de práctica de la prueba. En tercer lugar, por lo que se refiere a los créditos fiscales del 45% del importe de las inversiones, la sentencia asegura que la Comisión no violó el principio de proporcionalidad al estimar que la obligación de las autoridades españolas de recuperar las ayudas debía aplicarse a la totalidad de las ayudas otorgadas, y no limitarse a los importes que sobrepasaran los límites máximos fijados para las ayudas de finalidad regional”.
Es decir, que las autoridades españolas cuando ya sabían que debían recuperar el dinero, actuaron intentando recuperar lo menos posible, defendiendo a sus propios expoliadores, presumiblemente para mantener el acuerdo político con el PNV.
“Sobre esta cuestión, el Tribunal de Justicia pone de relieve que las diputaciones no aportaron a la Comisión información que permitiera acreditar que, en ciertos casos individuales, algunas de las ayudas otorgadas eran compatibles con el mercado común, en particular por haber sido otorgadas respetando los límites máximos regionales aplicables en el País Vasco y por cumplir todos los requisitos exigidos para acogerse a la excepción a favor de las ayudas de finalidad regional. Finalmente, el Tribunal estima que la larga duración de los procedimientos no vulnera los principios de seguridad jurídica y de buena administración.”
En resumen, no aportan documentación porque simple y llanamente eran subvenciones ilegales a todo trapo.
“El Tribunal de Justicia de la UE ya dictaminó el pasado 9 de junio que las ‘vacaciones fiscales’ de 1993 son ilegales”.
Recordemos que esas ‘ayudas’ de 1993 consistieron en una exención del impuesto de sociedades durante diez años y que en el momento de su aprobación, esos beneficios fiscales ni se notificaron a Bruselas. Aunque según fuentes comunitarias, casi todas las ayudas públicas que se concedieron en el marco de este régimen, ya han sido recuperadas, salvo las de una compañía guipuzcoana, cabe preguntarse ¿y quién paga los daños y perjuicios causados en las economías de las provincias castellanas colindantes durante estos largos 17 años de pleitos?, ¿han vuelto a reinstalarse las empresas en su anterior emplazamiento castellano? Sin duda, el papel del Estado, el más miserable.
José Antonio Pastor, portavoz de la ejecutiva del PSE, da una de las claves de lo sucedido, probablemente sin quererlo, de este asunto al afirmar (ver ABC del 29/07/2011): “las reglas de la UE hay que aplicarlas con menos frivolidad”. Por lo que se ve, en Europa las reglas son ‘menos frívolas’ y funcionan, no como en España. Las instituciones son independientes, ni el PNV ni un Zapatero cualquiera pueden hacer y deshacer a su antojo pasteleando sentencias judiciales tal y como ocurre en España a diario con los sumisos tribunales y jueces de diseño político.

De las declaraciones del secretario de Estado de Hacienda, Juan Manuel López Carbajo, también se desprende que las ayudas no han sido devueltas, pues ayer habló de la necesidad de iniciar un proceso de recuperación ‘arduo y laborioso’ […] El tiempo corre en contra de España, multada con 40 millones de euros por no haber recuperado aún todas las ayudas, cifra que se incrementará cada día hasta que no se reembolsen“. Así que señores, preparen la chequera que esto no ha terminado.

Para la consejera de Hacienda de La Rioja, Concepción Arruga, la lucha ‘culmina con el mayor de los éxitos’, algo que también celebró el portavoz de la Junta de Castilla y León, José Antonio de Santiago-Juárez, que criticó ‘la falta de un Gobierno serio en España’  quien avanzó que la Junta estudia pedir indemnizaciones ya que ha quedado demostrado que las exenciones suponen dar más beneficios a unos territorios que a otros. Argumentó que ‘las provincias más perjudicadas son aquellas que limitaban con el País Vasco, como es el caso de Burgos, ya que si una empresa estaba dudando entre instalar sus infraestructuras en la provincia burgalesa o en el territorio vasco, las ventajas fiscales hacían decantarse a la empresa por el segundo, siguiendo la lógica del planteamiento empresarial’ (ver El Norte de Castilla.es del 29/07/2011). Y no solo eso, añado yo, sino que las ya instaladas, han perdido competitividad, mercados y ventas por culpa de esas ayudas. En fin, que han servido para sembrar más desindustrialización y paro en Castilla. Que la sentencia nos haya dado la razón, no significa que el asunto esté zanjado ni que sea un éxito del todo, y eso es así porque el dinero no se ha recuperado, el daño causado durante esos largos 17 años no ha sido indemnizado y porque nos toca, para mayor repugnancia, pagar una multa que no merecemos. El 'éxito', señores Arruga y Santiago-Juárez, será efectivo cuando las tres diputaciones vascas nos paguen lo que nos expoliaron (esto sí es una verdadera 'deuda histórica')... y los responsables políticos del gobierno de España, con Zapatero a la cabeza, vayan a la cárcel, al modo islandés, por traición.

Recordemos ahora, que fueron las empresas riojanas quienes en 1994, presentaron la primera denuncia y destaparon las prácticas de competencia desleal contrarias al ordenamiento comunitario,  y que el Ejecutivo comunitario sólo lanzó  una investigación oficial en 2000, tras recibir la segunda denuncia, denuncias presentadas en los años 96 y 97 contra la aplicación de estas ventajas fiscales a las empresas Daewoo Electronics Manufacturing España SA (Demesa) y Ramondín, que hicieron que la Comisión tuviera conocimiento de la existencia de estos dos regímenes fiscales en la provincia de Álava. Más tarde también supo, de manera informal, acerca de medidas similares en Vizcaya y Guipúzcoa. Y mientras tanto, el gobierno de España callando y tragando.

Sede de la empresa Ramondín, en Logroño, que sin embargo aprovechó el paraíso fiscal vasco creado para trasladarse a Álava y que hizo saltar todas las alarmas del expolio empresarial castellano denunciado por empresarios riojanos.
Por su parte, el Partido Castellano (PCAS-PCAL), fue el único que, a mi juicio, solicitó algo que es de cajón, que la multa a España por no cumplir con las sentencias de los tribunales para mantener el apoyo del PNV, sea pagada (ver enlace a la web del PCAS) por las diputaciones vascas. "La multa la debe pagar quién ha cometido la infracción, sería una burla que ahora paguemos entre todos -los españoles- lo que sólo benefició a las empresas vascas, y al tejido productivo de esa comunidad autónoma, que además perjudicó al desarrollo industrial de territorios limítrofes como la provincia de Burgos […] Los que han cometido la ilegalidad son quienes deben pagarla […] incluso los responsables gubernamentales que miraron para otro lado, y dejaron hacer, debieran tener responsabilidad económica."

Por otro lado el PCAL-BURGOS también solicita “la derogación del concierto vasco, con el fin de que todas las comunidades dispongamos de las mismas normas [ya que] estamos creando un Estado con grandes diferencias". E injusticias.

En resumen, tanto las ‘vacaciones fiscales’ como el ‘cupo’ vasco y la ‘aportación’ navarra (ver artículo sobre el expolio del cupo vasco al resto de España) son expolios directos a Castilla. ¿Cuándo nos daremos cuenta de ello, hasta cuándo lo vamos a seguir permitiendo?
El trato denigrante, injusto y humillante para con esta parte de Castilla, consentido por el gobierno español, no acaba con los expolios vascos causados tanto por las ya ilegales vacaciones fiscales como por el concierto (o cupo) vasco, sino que además, el gobierno zapateril enculado por el PNV, aceptó el blindaje del concierto económico vasco, que impide que personas físicas o jurídicas, cuyos derechos e intereses sean lesionados por las normas forales fiscales, pueden defenderlos ante los tribunales ordinarios. El blindaje tiene por misión, impedir que los riojanos, etc. y su débil y ninguneado gobierno, puedan recurrir una ilegalidad. Esto también es parte de la desgraciada herencia que los castellanos recibimos de los socialistas. Ver aquí noticia original del 10/06/2011 en Rioja2.com, en la cual Pedro Sanz (PP) reclama, con nulo éxito por culpa de su nulo peso político, económico y poblacional en el contexto español consecuencia de haber creado una 'región' en lo que a lo sumo era una pequeña provincia castellana, se ponga fin al blindaje del concierto vasco. Incapaces de reunificar todas las provincias castellanas en una sola CCAA, nos las dan por todas partes, como se ve, y en eso los culpables somos nosotros. Las ambiciones personales de los políticos castellanos pudieron más que el interés general de Castilla.

P.D.: 23/12/2011. La compañía aérea valenciana de vuelos regionales perteneciente a la familia Serratosa, Air Nostrum, pero que actúa como línea regional de Iberia, ha anunciado que estudia trasladar su sede desde Valencia a Bilbao. Aunque no se trate de una empresa castellana, sirve como ejemplo del expolio empresarial que los territorios del régimen común sufrimos a manos de los denominados forales (Vascongadas y Navarra) y que Cataluña aspira a tener (una hacienda propia y un pacto fiscal). Como se ve el expolio empresarial no afecta solo a territorios limítrofes a esas dos regiones. 'Cataluña envidia el sistema fiscal vasco, no solo por ventajoso, sino porque además está protegida esa ventaja en la Constitución, y porque cada vez que Bruselas cuestiona el modelo foral, el gobierno español sale en su defensa' (José Mª Brunet, periodista de La Vanguardia, en la tertulia Dando caña, de Intereconomía TV, 22/12/2011). Como siempre digo, el Estado es claramente pro periferia, periferista más que centralista.

jueves, 15 de septiembre de 2011

El verdadero Corredor Mediterráneo.

Por Javier Martínez.

Por su interés, reproducimos íntegramente el artículo titulado 'El verdadero corredor mediterráneo', de Manuel Morón Ledro, presidente de la Autoridad Portuaria de Algeciras, en DiariodeSevilla.es, el 14/09/2011:

Contenedores en el puerto de Algeciras, el primero del Mediterráneo, que apuesta por el Corredor Central ferroviario.
"Hablamos de mercancías, no de pasajeros. Una aclaración previa necesaria, dada la confusión reinante en el actual debate sobre el asunto de los corredores ferroviarios.

"Hablamos de mercancías, no de pasajeros, luego esgrimir el PIB total de un área sin desglosarlo es estúpido"

Uno de los principales argumentos que vienen esgrimiendo aquellos que defienden la alternativa del denominado Corredor Mediterráneo, o Eje Ferrmed, frente al Corredor Central, es que el primero, de llevarse a efecto, conectaría entre sí los puertos de la fachada mediterránea española, cosa que no se consigue con el Corredor Central. Este argumento deriva, a mi entender, de un error conceptual que conviene desenmascarar.
 
Los puertos no se conectan entre sí por vía terrestre sino por vía marítima. La propia Comisión Europea, entre las recomendaciones contenidas en el documento de trabajo The New Trans-European Transport Network Policy. Planning and implementation issues (Bruselas 19.01.2011, Sec. 2011, 101 final), en el que se recogen los criterios que deberán presidir la selección de los corredores que finalmente quedarán incluidos en la red básica (core network) de la futura Red Transeuropea de Transporte, establece expresamente, en relación con el tráfico de mercancías, que "los puertos se deberán conectar solamente con sus respectivos hinterlands [zonas de influencia del interior], aunque puedan resultar conectados entre sí cuando así se derive del trazado de un eje principal."


"los puertos se deberán conectar solamente con sus respectivos hinterlands, aunque puedan resultar conectados entre sí cuando así se derive del trazado de un eje principal."

Lo anterior es así, fundamentalmente, por razones de sostenibilidad. El transporte marítimo es, con diferencia, el modo de transporte más eficiente desde el punto de vista energético. Baste con señalar que para transportar por tren los 14.000 TEU (contenedores de 20 pies) que actualmente puede llegar a albergar un solo buque portacontenedores harían falta nada menos que 175 trenes; ó 7.000 camiones, si se transportasen por carretera.

Los principales puertos del sistema portuario español se encuentran ubicados precisamente en la fachada mediterránea. Algeciras, el primero de ellos, movió el pasado año 70,3 millones de toneladas de mercancías; le siguen Valencia, con 64 millones y Barcelona, con 43,7. Entre los tres acumulan el 41,3% de las mercancías que mueve el conjunto de los puertos españoles. Estos tres puertos ofrecen, además, un gran número de conexiones marítimas, no sólo con puertos de otros países y otros continentes, sino también entre ellos mismos.

Hasta 43 líneas marítimas regulares conectan en la actualidad los puertos de la fachada mediterránea española entre sí, principalmente los tres principales. Esta tupida red de conexiones marítimas es la que constituye, en realidad, el verdadero corredor mediterráneo de mercancías. Pretender basar la defensa del Corredor Mediterráneo ferroviario en un supuesto desvío de todo este tráfico del modo marítimo al terrestre, aunque éste sea el ferrocarril, no deja de ser un craso error. Así lo entiende al menos, como acabamos de señalar, la propia Comisión Europea."


Buque Eugen Maersk, uno de los mayores del mundo, en Algeciras.
Desmontado el principal 'argumento' de los defensores del corredor mediterráneo ¿a quién creen que apoyará el ministro Blanco y el PSOE?, ¿de qué sirve esgrimir el alto porcentaje del turismo español que acuden a la costa mediterránea, acaso piensan llevarlos en trenes de mercancías? Afortunadamente para Castilla, Durão Barroso, presidente de la Comisión Europea, es portugués, lo que presupone que algo barrera para casa, para el corredor atlántico-central, porque si solo dependiéramos del gobierno de España, los castellanos estábamos vendidos.


Por otro lado, recordar que Morón Ledo, ya advirtió en Europasur.es el 05/08/2011, (ver enlace de la noticia aquí), que "las principales operadoras del puerto como Maersk, Hanjin Shipping, K-Line, Cosco y United Arab Shipping Company, lo que nos están pidiendo con insistencia es llevar sus mercancías a Madrid para tener acceso al mercado peninsular y eso se hace desde allí, no desde un extremo, y después llevar su mercancía a la frontera francesa para tener acceso al mercado europeo, eso que quede claro, que nadie venga a decirnos que nos vayamos a Valencia por la costa".

"las principales operadoras del puerto lo que nos están pidiendo con insistencia es llevar sus mercancías a Madrid para tener acceso al mercado peninsular y eso se hace desde allí, no desde un extremo, y después llevar su mercancía a la frontera francesa"

P.D.: Según algunos medios, la decisión final sobre la elección de uno u otro corredor, no será tomada en septiembre, como inicialmente se preveía, sino en octubre o quizás el 10 de noviembre.
Tras grandes rutas marítimas, grandes rutas terrestres, o corredores ferroviarios de mercancías, que deben conectar puertos y mercados, no puertos entre sí. Castilla la Nueva (Madrid más Castilla la Mancha) y todo el interior peninsular no puede perder ese tren.
 

martes, 6 de septiembre de 2011

‘Vacaciones fiscales’ y cupo vasco: doble expolio fiscal a Castilla más una multa (I).

Por Javier Martínez
¿Qué es el cupo vasco y porqué es un expolio económico para el resto de España?
Según el salmantino Roberto Centeno, catedrático de Economía de la Escuela de Minas de Madrid (ver Cotizalia.com el 21/02/2011), ‘el cupo vasco consiste básicamente en gestionar autónomamente su Hacienda Pública como si fuera un Estado soberano, solo que infinitamente mejor, porque además dispone de todo un país [España] para expoliar sin contemplaciones, algo que no existe en ningún otro lugar del planeta. Recaudan sus impuestos, los correspondientes a las ventas y negocios de las empresas radicadas en su territorio y fuera de él, ponen sus propios tributos y financian con ello una autonomía de lujo’. Lo han leído bien, recaudan fuera de su territorio, caso único en el mundo. Esto significa que los castellanos, entre otros españoles, o ‘restospañoles’, estamos haciendo el primo, estamos pagando impuestos a un territorio ajeno que además nos es hostil (incluso con coche bomba de vez en cuando) y aspira, sin disimularlo, a traicionarnos, eso sí, previa anexión de tierras castellanas como Treviño y Villaverde de Trucios. ¿No es esto hacer el primo por partida doble?

‘Se trata de un privilegio económico gigantesco originado en las guerras civiles del siglo XIX, que inexplicablemente se conserva exponencialmente aumentado en el XXI. Después de la Guerra Civil, Franco suprimió este privilegio en Vizcaya y en Guipúzcoa, pero lo mantuvo en Álava y Navarra. En 1979, el entonces Ministro de Hacienda, Paco Fernández Ordoñez (UCD) decidió suprimir este increíble privilegio, pero la oposición frontal -un auténtico disparate histórico- de los diputados de UCD, Mayor Oreja y Rodríguez Sahagún, cabezas de lista en Guipúzcoa y Vizcaya, respectivamente, provocó un fuerte enfrentamiento con Ordóñez que fue zanjado por Suarez, con una visión increíblemente cortoplacista y una falta absoluta de sentido del Estado, a favor de los dos últimos, logrando finalmente que en lugar de suprimirse se restableciera en Vizcaya y Guipúzcoa’. Como puede verse el privilegio económico perdura desde el XIX, ‘justificado’ en sus fueros, y ha saltado ya por tres siglos (salvo un período corto de tiempo). Nótese también quienes son los responsables de que el privilegio continúe, no fueron solamente las presiones nacionalistas periféricas deseosas de privilegios y superioridad, fueron políticos constitucionalistas, alguno de ellos, como Suárez, castellano ¿No tuvimos en Castilla más y mejores fueros, muchísimo más antiguos que el siglo XIX?, ¿quién era el reino y quién el señorío? El concierto económico, o cupos vasco y navarro, no es más que un peaje injustificado, un privilegio, un simple y puro agravio. Es un expolio consentido por nosotros mismos, puesto que en justicia no podemos echarles la culpa de todo a ellos. Cabe preguntarse ¿y a cambio de qué, por qué sucede esto, nos ganaron en una guerra y hemos de pagar cual súbditos y país colonizado? El Estado, que debe velar por la igualdad de derechos, deberes y oportunidades de los españoles permite lo que se ha dado en llamar asimetrías, eufemismo de no igualdad, dándose la paradoja no solo de que lo ampara, incluso constitucionalmente, sino que contribuye a que las regiones pobres del país, financien a las ricas aumentando los desequilibrios territoriales. Y los castellanos gritando ¡viva España!, mientras los nazirulos secesionistas gritan ¡independencia! ¿Alguien lo entiende?
Los 'residuos históricos', o 'privilegios históricos', son ahora llamados 'derechos históricos'.
‘El cupo sirve en teoría para pagar aquellos gastos del Estado de carácter general que correspondería pagar al País Vasco y Navarra en función de su participación en el PIB, pero esto es la teoría, la realidad es completamente diferente. En la última revisión de 2002, y mediante toda una serie de cálculos tramposos, que Rato (PP) se tragó íntegros, el cupo se fijó en 1.035 millones, y 300 el navarro, en lugar de los 2.000 millones y 600 millones que hubieran correspondido si los cálculos se hubieran hecho correctamente. Pero ni uno ni otro reflejan ni de lejos la aportación que estas regiones tendrían que realizar si funcionaran por el régimen común de todas las demás. En concreto, a día de hoy, y descontando aquella parte que financia el gobierno vasco, y que no hubiese tenido que financiar si estuvieran en el régimen fiscal común, pagan la décima parte de lo que les correspondería, con lo cual el resto de los españoles financiamos una administración de lujo, con sueldos y medios de lujo, respecto al resto de regiones españolas, las diferencias de remuneraciones son tan escandalosas que pueden superar hasta el 50%’. Y vengan bollos, que paga el vecino tontilán, esto es, nosotros. Como puede verse, España no es otra cosa que una teta a la que exprimir, succionar mientras de leche y se deje. Esta, y no otra, es la razón por la que todavía no se han independizado, la teta todavía no está seca, cuando esto suceda ya veremos. ¿Entendemos ahora de una vez por todas, porqué un funcionario vasco o navarro cobra hasta un 50% más que uno castellano con una productividad similar? Trabajamos para ellos.

‘Pero es que el tema es mucho peor, pues a todo este cúmulo inaceptable de privilegios se añaden los impuestos pagados por las empresas con sede social en el País Vasco, y que derivan de los beneficios conseguidos no solo en el País Vasco, sino en toda España. Cuando las empresas son medianas o pequeñas, es decir, la inmensa mayoría, el dinero del IVA y de todos los demás impuestos se lo quedan íntegramente las Diputaciones Forales, es decir, el suyo y el nuestro; cuando son grandes empresas, caso del BBVA, Iberdrola, Fagor, Eroski, etc, pagan en teoría por la cifra relativa de negocios en el País Vasco y fuera de él, pero en la práctica las Diputaciones Forales, que son las que tienen los datos, se llevan la parte del león'. Es decir, que los castellanos, entre otros españoles, cuando compramos productos y servicios a empresas vasco-navarras en Castilla, no pagamos impuestos en y a instituciones de  Castilla, como debiera ser, sino en Vasconia y Navarra, y aunque teóricamente ellos nos los devuelven (diferencia entre lo facturado dentro y fuera de sus territorios) no hay forma de saber cuánto era esa cifra, nos tenemos que fiar de las poco leales Diputaciones forales. ¿No es esto un insulto, un caso de colonialismo, no ya económico, sino institucional?, ¿porqué no tenemos una agencia de control, hemos de fiarnos de quién continuamente da muestras de no serlo? 

Cada cinco años, el gobierno central y los gobiernos vasco y navarro, negocian, o más exactamente pastelean, qué cantidad abonar, llamada cupo vasco o aportación navarra, dentro del marco de una ley estatal. El problema surge porque esa cantidad no tiene, como debiera, una fórmula objetiva de cálculo, o no se emplea, sino que se renegocia, se pastelea, se cocina, entre el inquilino de turno de Moncloa y los peris del norte, y varía enormemente en función de las necesidades de apoyo político del primero y las ganas de expolio de los segundos, llegando fácilmente a un acuerdo dado que el paganini es un convidado de piedra: el pueblo restospañol, donde estamos incluidos los castellanos. Así, Iñaki Anasagasti, viejo senador del PNV famoso por el aspecto de ensaimada de su grasienta melena más que por sus dotes intelectuales o principios morales, declaraba en su bitácora y en Deia el 4/09/2011, 'sin mayoría absoluta del PP [el 20N] se podrían meter goles en el Bernabéu en beneficio de los intereses de todos los vascos [...] es importante que no la tengan'. Pero hay más, el pago no solo no cubre para pagar los servicios comunes (Corona, Embajadas, Ejército, etc.) en la proporción que les toca de acuerdo a su PIB, y aquellos que, por no transferidos, aún presta el Estado en ambas regiones, sino que no aportan ni un euro al reequilibrio interregional entre comunidades ricas y pobres tal y como, en teoría, tiene por misión corregir el Estado, según la violada Constitución. De esto último, el sobrecoste que supone para el resto de regiones ricas contribuir al desarrollo de las pobres se queja solo Cataluña, con razón, pero no pide que se corrija, sino cambiar de bando y tener su propio cupo y pasar a succionar al resto. Esta es la causa de que los catalanistas apuesten por eliminarle la autonomía al resto de regiones, para que ni lleguen a protestar algún día si se consuma la fechoría. Lo que quiero para mí, no lo quiero para los demás. A Castilla, a sus múltiples trozos, mientras tanto, nadie la defiende, en el PPSOE todos callan porque anteponen sus intereses personales, y de partido, a los de sus representados. ¿Sucedería esto con una Castilla reunificada, fuerte, y con políticos mínimamente castellanistas, sin que ello suponga ser antiespañol, claro está?
El profesor Centeno prosigue: ‘Pero es que además hay numerosos impuestos de muy diverso tipo que corresponderían a la Hacienda española en un 80%, que es aproximadamente la cifra de negocio que las empresas y  entidades financieras ubicadas en el País Vasco realizan fuera de él, que se quedan íntegras las haciendas forales, por ejemplo, la compra de Scottish Power [por Iberdrola] añadió a las arcas forales 100 millones de euros año, mientras que el resto de los españoles pasamos la mano por la pared’. Lo que no menciona el profesor, es que Iberdrola no es otra cosa que la fusión de la bilbaína Hidroeléctrica Española con la castellana Iberduero y cuya sede se puso, lógicamente, en ese paraíso fiscal chupasangre que es Vasconia, con lo que también nos quedamos en su día sin los impuestos que esta gran y estratégica empresa genera, además del centro de decisión.

No queda la cosa ahí. Los principales saltos de agua y centros de producción eléctrica están radicados en tierras y ríos castellanos, que pese a ser dominio público, no recibimos ni un euro por el agua y electricidad que generan (Duero, etc. algo que perdura y se agrava con el auge en el interior peninsular de las energías renovables, donde las dos sub mesetas somos los grandes productores hispanos… para beneficio de vascos, gracias al maldito privilegio foral) por lo que el expolio es cuádruple (recursos naturales expoliados, impuestos de sociedades evadidos a otro territorio, impuestos de ventas, IVA, ocultado y ‘perdido’ en otro territorio y los citados impuestos varios  por compras en el extranjero, íntegramente saqueado). Si en la sub meseta meridional los ríos castellanos sirven para engorde de levantinos y murcianos, en la septentrional sucede lo propio con los vascos que se llevan no solo el agua ‘a perpetuidad’ para Bilbao (ver aquí cómo dos dictadores entregaron a los vascos el agua de las merindades castellanas) sino los beneficios de la electricidad. Así pues, el expolio fiscal no es el único que padecemos, también sufrimos el hídrico, el eléctrico y el empresarial.

Si los ríos son castellanos (y públicos), el agua por tanto también, y la electricidad que generan aquí en buena lógica también lo es, ¿cómo es posible que no nos paguen a nosotros por la luz los peris?, ¿cómo es posible que encima seamos nosotros los que paguemos a otros territorios? sucede que las sedes de las empresas eléctricas, donde se crea el trabajo, se pagan impuestos y se quedan los beneficios están en Bilbao o Barcelona, donde además se tiene o se aspira a tener, un régimen fiscal distinto claramente expoliador. ¿No es hora de darnos cuenta? es como si nuestros ríos fuesen de ellos, nos saquean nuestros recursos. Estamos pagándoles por nuestra propia electricidad, estamos dejando de cobrar por nuestra propia electricidad. Incluso teniendo un régimen fiscal común para toda España no es aceptable la situación.

¿Ven ahora porqué deseo que la madrileña ACS compre Iberdrola y traiga la sede a Castilla? (Por desgracia, ACS, cuando compra una empresa, suele mantenerla independiente jurídicamente como filial y no suele cambiar la sede, cosa contraria a lo que hacen vascos y catalanes, es decir, ACS no actúa como 'empresa castellanista' sino solo como empresa) Para terminar con toda esta injusticia que España permite desde su misma Constitución al incluir un régimen fiscal diferente para según qué españoles. Otro día hablaremos de otras empresas castellanas, generalmente estratégicas y con fuerte capacidad tractora sobre la economía, o instituciones radicadas aquí (caso de la Comisión de las Telecomunicaciones) entregadas, o forzadas a fusionarse, con más o menos resistencia, por gobiernos españoles (tanto del PSOE como del PP) a vascos, pero sobre todo catalanes, a cambio de apoyos políticos (Endesa, a la que Pascual Maragall llegó a calificar como ‘medio Estatut’, Terra, Gas Madrid, Unión Eléctrica Madrileña Fenosa,…) o de empresas que ya desde su proyecto fundacional fueron convenientemente ‘invitadas’ a elegir sede en una ciudad concreta (Barcelona) desde la política (La Sexta TV, Click Air…) incluso teniendo capital mayoritario o 100% castellano (cosa que hacen para conseguir la imprescindible licencia político-administrativa) y eso por no hablar de leyes comerciales ‘antiCorteInglés’ o zancadillas hasta el cierre de filiales de empresas castellanas (como Pascual), o la entrada, por indicación política, de La Caixa en empresas clave castellanas como Telefónica, Repsol, etc. no para sumar, necesariamente, sino para defender a alguna filial menor ‘catalana’ en apuros. Cada vez que el inquilino de la Moncloa necesita apoyos, Castilla, como se ve, de una forma o de otra, siempre paga, somos moneda de cambio barata. Y lo peor es que no faltan tontilanes en la meseta que creen aún ‘en el mayor carácter emprendedor’ de los peris, esa gente que sin haber sido nada en la historia, o muy poquito, lo son todo medrando en el que todavía es su país, a nuestra costa, eso sí, y con nuestro permiso, por ese maldito defecto que tenemos los castellanos de pensar siempre más en el conjunto español, en un tiempo en el que nadie más de ese conjunto lo hace ya, que en nosotros mismos. No se puede ser tan desprendido ni tan ingenuo. No es un error pensar en la casa común, al contrario, es un claro acierto, el error es hacerlo en solitario. ¿Qué sentido tiene hacerlo si nadie más lo hace? En la calle pueden oírse ya expresiones hace poco impensables como ‘que se marchen ya’, ‘a qué esperan’, etc. señal inequívoca de que algo está cambiando pese a que los políticos no quieren enterarse. Hasta el mismísimo Jordi Pujol reconoce abiertamente que el rechazo y la imagen de Cataluña en Restospaña ha empeorado… y sorprende que hasta parece preocupado ¿teme que se acabe la teta o que todos se apunten a succionar? Más bien lo segundo, piensa que tocaría a menos, o simplemente que no podrían, por inviable, como quieren desde hace tiempo, apuntarse al sistema del cupo. Por eso abiertamente no quieren autonomías para todos, no quieren el 'café para todos' (y no faltan declaraciones de Durán Lleida, Oriol Pujol, etc. pidiendo poner fin al sistema autonómico para todos, nosotros somos Restospaña a secas, y punto, nos vienen a decir), pero sí para ellos, porque la autonomía para todos significa un freno a sus aspiraciones succionadoras ya que, inevitablemente, si ellos quieren cupo, el resto automáticamente lo pide y eso es inviable y lo saben. Por desgracia, esas expresiones comentadas, creo que se trata más del hartazgo al victimismo llorica y al chantaje permanente que la gente siente, que al descubrimiento por parte castellana de que somos los perdedores, los expoliados, los paganos y que hay que revertir la inaceptable situación.
"Se trata de un sistema distinto al de las demás comunidades, pero no debería de ser discriminatorio, ya que este sistema de asignación de recursos, por sí mismo, no debería de beneficiar a los territorios vasco y navarro en cumplimiento del artículo 138.2 de la Constitución que establece que 'las diferencias entre los estatutos, no podrán implicar, en ningún caso, privilegios económicos o sociales'. Sin embargo, dado que la clave está, no en el diferente método de financiación sino en la concreta cuantificación del cupo vasco y la aportación navarra, negociado entre gobiernos, lo cierto es que se han ido produciendo importantes diferencias que han llegado a ser escandalosas: en este momento, la financiación per cápita entre los ciudadanos de Navarra y País vasco, comparada con la del resto de comunidades, es casi el doble a favor de las primeras". (Artículo '¿Ahora toca el concierto?' Francisco de Carreras, La Vanguardia 30/09/2010)
Los catalanistas de todo pelaje, pero principalmente CiU, parecen haber advertido el negocio vasco-navarro y no quieren quedarse atrás. Así, Jordi Pujol, que no es precisamente un españolista, y menos aún pan castellanista, ex presidente de la Generalidad, en entrevista concedida a Valentí Puig en ABC el 15/01/2006, tras expresar un ambiguo “Cataluña es España, pero a su manera” (que es como decir sí, pero no), declara, a propósito de una pregunta sobre el cambio conseguido en España: hay un gran progreso en las regiones con subdesarrollo. En varias de ellas ya no se puede en absoluto hablar de subdesarrollo. El cambio ha sido espectacular. ¿Gracias a qué y a quién? Pues, gracias a la política del Estado, gracias a las autonomías y gracias a la gente de estas regiones. Pero todo ello enormemente estimulado por los fondos europeos estructurales y de cohesión y por la contribución procedente de algunas autonomías con renta y PIB altos, con excepción de las forales”. Y no le falta razón. Implícitamente ha reconocido, en su final, “con excepción de las forales”, que hay quién no arrima el hombro y quién tiene una situación de privilegio. Lo lamentable es que no aspira a corregir esa situación de injusticia eliminando el privilegio que al resto, Cataluña incluida por estar (al menos de momento) en el régimen común, perjudica, sino que quiere que Cataluña pase a equipararse a Vascongadas y Navarra uniéndose a quienes chupan de la teta. “En el caso de Cataluña el déficit fiscal ha llegado a ser muy alto. Llega a frenar el desarrollo económico y también social de Cataluña. Esto es lo que, por diversos motivos, se ha exacerbado durante los últimos años. Y ahora es insostenible” continua don Jorge Polluelo, traducción literal castellana del ex presidente regional. Tampoco en esto último le falta razón, las regiones ricas de régimen común, por soportar más carga de la que debieran, por soportar ‘más solidaridad’, ven frenado su desarrollo, y más cierto será si todas las ricas se apuntan a la fiesta foral. Pero ojo porque culpar del freno, caso de ser cierto, a la ‘solidaridad interregional’, es cuando menos tramposo, no es toda la verdad. Así, Madrid, la que con diferencia más aporta, no le impide ser también la que más crece (ver informe ‘Las balanzas fiscales de las CCAA con la administración central 1991-2005 del BBVA’). Y todo ello hablando, exclusivamente, de las balanzas fiscales, de las balanzas comerciales, lógicamente se las callan, por lo beneficiosas que les resultan, ya que en ese ámbito, como en el de los flujos ahorro-inversión, resulta que seguir siendo español es altamente rentable. Es hora de advertir ya, en qué consiste ser nacionalista periférico. Su 'manera de ser español' consiste en aplicar la máxima 'lo mío es mío y lo vuestro, de todos los españoles'. Y mis compatriotas castellanos, mientras tanto, en su gran mayoría, mirando al cielo, incluso no falta el merluzo de turno, que con atrevida ignorancia, llega a posicionarse a favor de las tesis peris porque no alcanza a ver más que una simple territorialización de la recaudación.
"Los flujos económicos entre Cataluña y el resto de España no se limitan a la balanza fiscal, [como interesadamente se limitan a recordar los catalanistas], existen también las balanzas comerciales y las de ahorro-inversión. Y en las balanzas comerciales de bienes y servicios el superávit de Cataluña con el resto de CCAA es de más de 24.000 millones de euros, más del doble que su 'déficit' fiscal. Pero es que además, y más trascendente si cabe, a través de los bancos y cajas catalanas, parte del ahorro del resto de España se 'transfiere' a Cataluña. Se estima que por cada cien euros de ahorro en Cataluña, se invierten 180 financiados gracias a este mecanismo. ¿Qué pasaría si las Comunidades perjudicadas exigieran le reducción del déficit comercial y de ahorro-inversión?" (Roberto Centeno, 'El intolerable desafío nacionalista', Cotizalia.com, 12/09/2011). Y digo yo, ¿no es hora de reequilibrar también las balanzas comerciales? Las compañías pagan impuestos allí donde están radicadas sus sedes centrales, pero generan su actividad allí donde están sus clientes (toda España). De esta manera, una compañía con sede en Madrid o Barcelona que venda el 80% de su producción en el resto de España, aparece como contribuyente en su ciudad de origen, y genera en este territorio unos grandes ingresos a Hacienda, aunque tenga otras sedes y sus trabajadores estén desperdigados por varias provincias, adjudicándose esa riqueza. Esto, además, distorsiona aún más el cálculo de estas balanzas. Las regiones no pagan, lo hacen los ciudadanos y las empresas, de tal modo que regionalizar de la forma que los catalanistas proponen es adjudicarse riqueza que no les corresponde. 
Todo esto me hace recordar que los castellanos podríamos volver a la situación de los siglos XVI y XVII, donde éramos los únicos que pagábamos impuestos (entre un 500 y 800% más) y aportábamos soldados, incluso a las guerras de la Corona de Aragón, y que es la principal causa de nuestra posterior decadencia, a decir de no pocos historiadores y economistas, situación magistralmente descrita por Quevedo en su famosa frase: "En Navarra y Aragón, no hay quien tribute un real; Cataluña y Portugal, son de la misma opinión, sólo Castilla y León, y el noble pueblo andaluz, llevan a cuesta la cruz. Católica Majestad, ten de nosotros piedad, pues no te sirven los otros, así como nosotros.". Más leales que nadie, más apaleados que nadie ¿porqué no nos rebelamos de una vez?

¿Qué pasaría si el régimen fiscal vasco se extendiera a Cataluña?

‘El nacionalista Artur Mas, [Arturo cuando abre cuentas en Suiza, no lo olvidemos, como se publicó antes de las elecciones catalanas que ganó, sin que el dato importase a la ciudadanía de aquella región] dentro de su estrategia soberanista y anexionista, con un desprecio absoluto hacia España y su Constitución, y sabiendo que un referéndum independentista lo perdería [como la propia CiU reconoce], ha decidido algo mucho mejor que la independencia, convocar un ‘referéndum’ para la implantación en Cataluña de un sistema de cupo similar al del País Vasco y Navarra, a pesar de haberle sido expresamente prohibido por el Tribunal Constitucional. Con independencia de que en cualquier país civilizado, una rebelión de este tipo no sería tolerada y en caso de ir adelante, el Sr. Mas y quienes las convocaran irían directamente a la cárcel, y la autonomía de Cataluña suprimida, como fue suprimida la del Ulster, y no pasó absolutamente nada, desde un punto de vista estrictamente económico la propuesta no se sostiene. Se trataría de un expolio similar al del País Vasco pero multiplicado por tres, dado el tamaño de la economía catalana, donde Cataluña pasaría a aportar al resto de España la décima parte de lo que aporta actualmente'. Como puede deducirse, alguien tendrá que pagar el diferencial no aportado para sostener las cosas comunes y ese alguien seremos los castellanos, junto con algún otro desinformado ‘restospañol’ más que quede. ¿Aceptaremos el papel de paganini de nuevo? Si por la UCD, luego PP, fuese, ya vimos que sí, pero ¿y si dependiera del PSOE, la otra cara de la moneda PPSOE? Unas líneas más y saldremos de dudas.

‘Si todas las regiones españolas funcionaran por el sistema de cupo, [es decir, si todos pagásemos conforme a cómo lo hacen vascos y navarros] la Hacienda española perdería el 78% de sus ingresos y sería imposible financiar las Fuerzas Armadas, las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, las Instituciones, el Servicio Exterior, el pago de los intereses y la amortización de la Deuda Pública, el pago a las Clases Pasivas y los pagos debidos a la Unión Europea, es decir, pura y simplemente España desaparecería como nación, en línea con la opinión de Zapatero, para quien España es ‘algo discutido y discutible’’. El dato del 78% es escalofriante y revela hasta qué punto soportamos en nuestras espaldas una injusticia fiscal brutal, no solo pagamos lo que nos toca, sino lo que otros dejan de pagar. Es aquí cuando inevitablemente me acuerdo de esos paisanos míos, castellanos de Cuenca y de cualquier parte,  que dicen con la alegría del bobo ignorante, ¡hacen bien!, ¡defienden lo suyo! No defienden lo suyo, roban lo nuestro, y lo hacen con la aquiescencia del Estado común, no lo olvidemos, que lo envuelve de legalidad. Por eso cuando alguien todavía se cree eso de que ‘Castilla hizo a España’, cosa que personalmente creo es menos cierto de lo que suele afirmarse, se me ponen los pelos como escarpias de la rabia. No sé en otro tiempo lejano si fue así, pero hoy, España es un país hecho por y para la periferia en lo esencial, en su arquitectura administrativa y jurídica, en su ley electoral, en la planificación radial de infraestructuras de todo tipo, incluidos los acueductos de expolio de agua, en su régimen fiscal, en su trato lingüístico… todo en función de los peris.

‘No sé qué hará Zapatero respecto a la rebelión abierta de Más, pero habida cuenta de que se han fumado un puro con la Constitución y con el Estado de Derecho siempre que les ha convenido, puede suceder cualquier cosa, y aunque la aceptación por un Presidente de Gobierno de España de un hecho prohibido por el Constitucional, que pone en peligro cierto la existencia misma de España como nación, es un acto inequívoco de alta traición, creo que Zapatero hará, como siempre, lo que crea que le favorece más políticamente, porque España y los españoles le importamos un pimiento. Y ¿qué ocurre si lo acepta?’
Foto del trío calavera. “El gran problema no es que Solbes se haya alineado -rene­gando de sus supuestas convicciones-­ con la banda del gasto, eso es sólo una indignidad menor; el problema es haberse rendido ante los separatistas, haber planteado unos Presupuestos con déficit oculto, con la mayor pre­sión fiscal de toda la Historia de Espa­ña, y haber destruido el modelo de equidad-solidaridad que garantiza la Constitución, y que era la base para la convivencia entre los españoles.[…] Y lo que ya resulta el colmo de los colmos, es que, según el artículo 206.5 del Estatut, la parte que Catalu­ña aportará al Estado no podrá ‘alte­rar en ningún caso la posición de Ca­taluña en la ordenación de rentas per cápita entre CCAA’; es decir, que si por la incompetencia probada de los gobiernos de la Generalidad, Cataluña perdiera posición económica relativa, como ha ocurrido en los últimos 20 años, el Estado tendría que garantizar con el dinero de todos los españo­les el mantenimiento de su posición [El Estado está obligado a transferirles la cantidad que sea necesaria del Fondo de Compensación para que no la pierda. Es decir, el derecho exclusivo al saqueo de España. Adicionalmente Montilla se ha arrogado, y  Zapatero ha aceptado, el derecho a ser él y no el gobierno de España quien decida cuales son los servicios básicos que deben ser financiados por los restospañoles y cuáles no]. Y esto a pesar de que Cataluña vende en el resto de España los dos tercios de lo que produce y obtiene una cantidad similar del beneficio de sus empresas, por lo que si el resto de España dejara de comprar productos catalanes, sus empresas fueran ex­pulsadas u obligadas a cambiar la se­de social, y se vetase como sería obli­gado su entrada en la DE, Cataluña no podría sobrevivir. Entonces, ¿por qué tenemos que aguantar la perse­cución feroz de todo lo español, el boicot a los productos no catalanes, el victimismo y el saqueo de España? Y exactamente lo mismo es válido para el País Vasco. El cupo vasco es un insulto inaceptable  hacia el resto de las regiones españolas: siete veces, y media, menos de lo que le correspondería pagar a esta comunidad si tuviese el régimen fiscal del resto de autonomías, aunque esto es culpa del PP y del PSOE a partes iguales. […] Y en cuanto a la desigualdad del gasto, creo que ya está todo dicho. Cataluña y Andalucía se llevan casi el 40% de las inversiones en infraestructuras. Pero es que hay mucho más. Con el esquema pactado con los separatistas, toda la deuda pública –intereses y principal-, todos los pagos a la UE, el Fondo de Contingencia, etcétera, etcétera, no recaen ni sobre Cataluña ni sobre el País Vasco; se benefician, pero no pagan un euro, lo pagamos todos los demás. Por ejemplo, de los 40.000 millones de euros para financiar la ampliación de Europa, que tan irresponsablemente comprometió Zapatero, el País Vasco no pone un céntimo -nos dan la limosna del cupo y que nos zurzan-; y Cataluña si pierde renta, tampoco da nada. Pero si aún así la siguiera perdiendo -por ejemplo que Valencia u otra región la supere-, el Estado está obligado a transferirle todo el dinero necesario hasta que estos ineptos y despilfarradores recuperen la renta que les corresponde por la gracia de Dios”. Roberto Centeno, ‘Presupuestos a la desesperada’, 26/09/2007, El Mundo.
Un servidor opina como Centeno, al leonés Zapatero, pero ojo, no solo a él, le importamos un pimiento, al PPSOE solo le importa mantenerse en el macho, conseguir mayorías parlamentarias suficientes para seguir, y eso solo lo pueden conseguir vendiéndonos al resto, castellanos o no, los llamados ‘restospañoles’, ya sea en este tema, en el de las infraestructuras (ver el escándalo de cómo el PSOE tumba poco a poco el corredor central ferroviario de mercancías para apostar por el mediterráneo), en el de los trasvases de agua, etc. Ser fiel a España, cuesta y duele reconocerlo, es un mal negocio, serle infiel y hostil, es altamente rentable. El aspirante de turno a inquilino de la Moncloa siempre paga a traidores, esto no es Roma,…con dinero ajeno. Es el maquiavélico final en que se traduce una ley electoral injusta que favorece a partidos pequeños claramente anti españoles (y sobre todo, anti castellanos, no lo olvidemos) y abiertamente insolidarios con el resto, por lo que la conclusión es clara: o cambiamos la ley electoral y aceptamos aquello de un hombre un voto, o nos hacemos todos nacionalistas, y que pase lo que Dios quiera, pero no podemos seguir haciendo el primo. Un servidor no está por la labor. Dicho en otros términos más amables, o fueros para todos, o para ninguno. Ahora pensemos qué es mejor.

Continuemos: ‘Si lo acepta, y aunque la realidad sería por supuesto más compleja, el dibujo aproximado de la situación sería el siguiente: dado que el PIB de Cataluña es tres veces el del País Vasco, Más pedirá lógicamente un pago al Estado español del orden de los 3.000 millones de euros por año. Y teniendo en cuenta que los ingresos impositivos totales y la parte de Cataluña en los mismos proporcional a su PIB, estaríamos hablando de unos 27.000 millones de euros, de los que habría que deducir la parte de gastos que entonces tendría que financiar el gobierno catalán y que ahora financia el Estado, estaríamos hablando de unos 23.000 millones, con lo que el agujero primario que la extensión del cupo a Cataluña supondría para el Estado sería de unos 20.000 millones’ añade Centeno. ‘Luego vendría el agujero derivado más difícil de cuantificar, pero enorme. Cataluña vende en el resto de España del orden de los dos tercios de los bienes y servicios producidos en la región. Para las grandes empresas el criterio de repartir los ingresos impositivos generados por sus actividades en función del lugar generado, funcionaría parcialmente, parcialmente porque solo la hacienda catalana sabría de verdad donde han vendido qué, o a donde son imputables los beneficios obtenidos, a parte que habría numerosas partidas, como ocurre en el País Vasco con el BBVA, Iberdrola…, de las que se apropia directamente la hacienda local por estar ubicadas allí y tiro porque me toca'.  Y si solo ellos saben dónde y a quién han vendido, pues ya tenemos a los estafados castellanos pagándole impuestos a una administración ajena de nuevo. Y si esto sucediera, como ya sucede con el concierto vasco y navarro, sería con el plácet del PPSOE, no lo olvidemos, y de nosotros mismos, por aceptar ciertas cláusulas de la Constitución (que se aprobó en una época, la poco santa Transición, donde además se consumó la división y ruptura de la Castilla nuclear en hasta cinco girones para su mayor debilidad política y económica y su mejor control y expolio), y votar a quienes nos desprecian ‘porque no somos ni nacionalidad histórica ni tenemos lengua propia ni fueros’ ni nada que se le parezca. Nuestra lengua debe ser ‘impropia’ y solo sirve para pagar más que nadie por lo que se ve.

‘Ahora consideren la infinidad de empresas medianas y pequeñas, responsables de la mayor parte de las ventas de productos catalanes fuera de Cataluña, que como ocurre en el País Vasco ingresaran todos sus IVAs, [impuesto de] sociedades…, en la hacienda local, mientras la Hacienda de España pasa la mano por la pared. Si los productos fueran franceses, ingleses o chinos, el IVA generado en España sería recaudado íntegro sin problemas por la hacienda española, pero en éste caso la experiencia demuestra que no es así. Por dar una cifra de orden, haciendo un paralelismo con el País Vasco, que sabemos cómo funciona en la práctica, la hacienda española dejaría de percibir no menos de 30.000 millones de euros, un agujero sencillamente inasumible. Con el cupo, los intereses de la deuda española a Cataluña le traería al pairo, igual que hoy al País Vasco, ‘no estamos para pagar pufos’ dicen con toda su cara, cuando ellos han contribuido como el que más; le traerían al pairo los pagos a la UE, las aportaciones al Servicio de Empleo, las clases pasivas...’
Foto del acuerdo sobre el nuevo Estatut que agujereaba por 150 sitios la Constitución y que posteriormente fue enmendado, parcialmente, por el Tribunal Constitucional. Entre otras cosas preveía que Cataluña se quedase con el IVA recaudado por empresas catalanas (o con sede en Cataluña) fuera de su territorio. Dicho con otras palabras, si en Castilla compramos cava catalán, el IVA no se queda aquí, sino que pagamos impuestos a una administración ajena que además nos es abiertamente hostil y profundamente anticastellana, más que antiespañola, que también, como lo demuestra que con otros españoles peris no dudan en colaborar políticamente (Galeusca, o Cagaleus) en rascar lo que puedan a Restospaña. Si por el contrario adquirimos productos franceses, alemanes o chinos en Madrid, Cuenca o Toledo, el IVA, si va a las arcas públicas locales, tal y como sucedería en cualquier país serio y digno del mundo.
La durante muchos años la pública Sociedad Española de Automóviles de Turismo (SEAT), perteneciente al Instituto Nacional de Industria (INI), eligió, por decisión de los militares fundadores, a Martorell (Barcelona) como sede de la empresa que actuaría durante años cuasi como monopolio en el mercado español de automóviles (época autárquica). Fundada con dinero de todos los españoles llegó, por sí sola, a representar el 1% del PIB español de la época. Durante décadas, cualquier español que comprase un SEAT, pagaba el impuesto de Tráfico de Empresas no a la hacienda de su provincia, sino a la de Barcelona. Las incontables crisis de la compañía, también fueron pagadas por todos los españoles. En sus instalaciones se fabricará hoy el Audi Q3, necesitando de inversiones millonarias que serán asumidas en un 50% por el Estado español (el otro 50% por el grupo Wolkswagen, actual propietario). Sin embargo, los beneficios e impuestos (IVA y sociedades) recaudados por la venta de coches, caso de aprobarse el Estatut como los catalanistas quieren y del proyectado pacto fiscal catalán, serán solo para los catalanes. Restospaña convertida en una colonia de Cataluña, la vieja aspiración catalanista (españoles sí, pero para succionar, y si no, nos independizamos). En la foto, Franco en la inauguración oficial de SEAT.
En resumen, lo que nos dicen es, las facturas para Castilla y demás Restospaña. El historiador y político Sánchez Albornoz fue profético: 'juntos, castellanos y leoneses, sobreviviremos, separados seremos piltrafas de Cataluña, Euscadi y Galicia' en su famosa carta a los castellanos (ver Por la Castilla total).

Y si aún no ha quedado suficientemente clara la caradura y cinismo de nuestros, a pesar de todo, paisanos peris, otro ejemplo más de hasta dónde quieren llegar (y quién sabe si el Gobierno de España aceptará). Resulta que (ver artículo de Emilio J. González, ex redactor de política económica de Expansión, hoy articulista en Libremercado.com '¿Avalar la deuda catalana? ni locos' , 29/06/2011) ‘la Generalidad de Cataluña anda asfixiada, [como prácticamente toda España], por el estado calamitoso de sus finanzas y no se les ha ocurrido otra cosa que proponer que el Estado avale las emisiones de deuda pública de las autonomías [visto que los mercados no se fían de ninguna (y puede que pronto tampoco del Estado)]. Tal y como están las cosas en términos institucionales en nuestro país, que el Estado avale la deuda catalana sería un error. La Generalidad y CiU llevan tiempo dando muestra tras muestra de deslealtad institucional y como, además, su vocación última es la independencia de Cataluña, ¿por qué los demás españoles les tienen que avalar un endeudamiento que luego una Cataluña independiente puede repudiar, pasando la responsabilidad del pago a lo que quede de España?’ Por si alguien no lo ha advertido, si se independizasen y dejasen de pagar, porque sí, nosotros, Restospaña, tendríamos la obligación de hacerlo, ¿conoce alguien mejor arma militar para destruir, que provocar la ruina total instantánea del contrario sin pegar un tiro?, ¿nos fiamos? El Estado no debe avalar a nadie, que cada cual ponga orden en sus cuentas y se saque las castañas del fuego.
Cartel en contra del Estatuto catalán de 1932, que nos convertía a los restospañoles, de facto, en una colonia catalana, en ciudadanos de segunda. La historia, como se ve, no es nueva, en 1932, incluso antes, como se denuncia en el conocido como 'Mensaje de Castilla' de 1918  (redactado tras frecuentes manifestaciones en Valladolid, Burgos,...) se advierte del intento de convertir fiscalmente a Restospaña en una colonia de Cataluña. Y es que el catalanismo (ideología que promueve desde sus orígenes la supremacía racial catalana sobre los castellanos) de todas las épocas tiene muy claro en qué consiste su manera de ser español: 'lo mío es mío, y lo vuestro de todos'.
Volviendo al artículo del profesor Centeno: “es evidente, que desde un punto de vista económico, al resto de los españoles le interesaría infinitamente más la independencia [de Cataluña] que el cupo, el cupo nos convierte pura y simplemente en una colonia tipo del XIX, dicho lo cual quiero dejar claro que yo estoy radicalmente en contra de darles la independencia, pues para eso es infinitamente más sencillo aplicar el artículo 155 y suprimir temporalmente la autonomía y no pasaría nada -independencia que en todo caso, exigiría convocar referéndum provincia a provincia, pues sería absolutamente inaceptable y antidemocrático, que unas provincias impusieran su criterio a otras, pero la que así lo decidiera que se fuera”.

“Pero hay algo en que Más tiene toda la razón, ¿por qué el País Vasco y Navarra si y Cataluña no? Pues porque lo que hay que hacer es suprimir el cupo del País Vasco y Navarra, que es un robo legal inaceptable. Si a Más se le prohíbe el ‘referéndum’, es evidente que los cupos vasco y navarro no pueden mantenerse ni un día más. Ni el PSOE ni el PP están por la labor, solo UPyD lo propone”. Lo dicho, o ‘fueros’ para todos, cosa que se ha visto inviable pero que para los castellanos sería más justo, o para ninguno, como propone Centeno y UPyD. Esa es la encrucijada de la cual no sabemos salir, y nos sale caro. Si aceptamos el status actual, pagamos más, si vamos todos al cupo es inviable, y también pagamos. No queda otra, no al cupo. Como puede verse, no hace falta ser españolista para oponerse al cupo/aportación vasco/navarro, y a su extensión a Cataluña, basta con ser mínimamente castellanista (sin que ello suponga ser anti nada, ni anti español ni anti periferia), basta con no ser idiota, con tener un mínimo de dignidad.

Otro día, hablamos de las ‘vacaciones fiscales’ vascas, segundo expolio económico a Castilla  y a otras regiones, y de la multa que Bruselas nos ha puesto a todos los españoles, y que también hemos pagado proporcionalmente, por permitirlas. Además de expoliados, multados.
Otro trío calavera. ZP y el PSOE, a la desesperada, se echa en brazos de los peris. Ante el nuevo chantaje de los peris para apoyarle los presupuestos, se  ha comprometido a otorgar a Cataluña, en grave detrimento del resto de Comunidades ‘el mejor acuerdo de financiación de su historia’  ignorando malévolamente que éste es un juego de suma cero, lo que uno recibe de más (Cataluña) otros (Castilla, y un largo etc.) lo reciben de menos. No es una cuestión pues, entre nacionalistas peris y españolistas, ni entre nacionalistas peris y castellanistas, sino entre su sanidad o la nuestra. Para los tres lo importante es el sillón, luego el PSOE, y nunca jamás Castilla y su gente. Ya está bien de que se venda como 'salvar España', 'salvar la gobernabilidad, la estabilidad política', etc. lo que simplemente es salvarse ellos a costa del país o de alguna de sus partes.

El PSOE nos toma el pelo, se mea encima de los castellanos, promete y pacta con los peris asuntos que perjudican a Castilla,… y lo peor, con nuestro permiso, con algunos de nuestros votos. El PSOE carece de un proyecto global español. Como señala el prestigioso profesor Ghemawat de Harvard-IESE, ‘las regiones españolas comercian mucho más entre sí, que con el resto del mundo, el nivel de exportaciones de Cataluña a Aragón, es el mismo que a toda Francia, su principal mercado exterior con diferencia […] Sin el resto del mercado español, la economía de Cataluña retrocedería 20 años’, o en otras palabras, la renta per cápita de Cataluña caería casi a la mitad, luego, ¿quién debe temer sino ellos la posible independencia de Cataluña?, ¿a santo de qué viene aceptar sus continuos chantajes? Estos solo se entienden por el interés y ambición personal, y de partido, del inquilino o aspirante de turno (necesitado de apoyos) a la Moncloa.
P.D.: 23/12/2011. La compañía aérea valenciana de vuelos regionales perteneciente a la familia Serratosa, Air Nostrum, ha anunciado que estudia trasladar su sede desde Valencia a Bilbao. Aunque no se trate de una empresa castellana, sirve como ejemplo del expolio empresarial que los territorios del régimen común sufrimos a manos de los denominados forales (Vascongadas y Navarra) y que Cataluña aspira a tener (una hacienda propia y un pacto fiscal). Como se ve, el expolio empresarial no afecta solo a territorios limítrofes a esas dos regiones.