lunes, 25 de julio de 2011

¿A quién debemos el AVE en Cuenca?

Por Javier Martínez
En diciembre pasado, con la inauguración de la línea de alta velocidad española (AVE en sus siglas, si bien al gobierno de Zapa, el destructor, siempre se le cae la E) entre Castilla la Nueva (Madrid y ese engendro administrativo de nombre anti histórico llamado CLM) mas Comunidad Valenciana y Murcia, se produjo un debate que tenía visos de decaer cuando acabasen las elecciones, como así ha sido: ¿a quién debemos el AVE?
En mi opinión ni a todo el PP ni al PSOE (o PJOE, como gustéis) por la siguiente razón. Fue Aznar quien dio vía libre a su construcción, es cierto, pero recordemos que su entonces ministro de Fomento, Arias-Salgado, manejaba 4 ó 5 trayectos, ninguno de los cuales pasaba por Cuenca capital (por la provincia, obviamente sí, no podían esquivarla, que si no...). En Cuenca, mientras tanto se generó mucha polémica y preocupación (pensábamos que ocurriría como con la A3 que pasa muy lejos) que se expresó en varias manifestaciones convocadas por una plataforma civil creada para la ocasión y unas 50 mil alegaciones al trayecto, si no recuerdo mal, una cifra espectacular para el tamaño de la ciudad. Aznar cesaba a Arias-Salgado, desconozco el motivo real, y un tal Álvarez-Cascos irrumpía en Fomento. Fue el primero en apreciar en su justa medida el interés político-social que la decisión tenía en la sociedad conquense, se reunió con todos los presidentes de las cuatro regiones implicadas y pactó un trayecto satisfactorio para todas que incluía a Cuenca capital (vergonzosa la posición de Albacete, que pretendía excluirnos). Aznar puso la primera traviesa en Picasent (Valencia). Años y años de obras inevitables dada la envergadura de la infraestructura... y en esto que llega el 11M y Zapatero al gobierno que se encarga de terminar una infraestructura ya aprobada, ya pactada y en obras. Ni su alianza con los separatistas de ERC pudo parar la obra ya en marcha (como si pararon el trasvase del Ebro que estaba destinado a saciar la sed de Levante y Murcia y descargar al castellano Tajo de su sangrante, agónica e injusta situación).
Entonces, ¿el mérito es del PP? el mérito es, en primer lugar de la sociedad conquense que se movilizó, se organizó en una plataforma, salió a la calle, olvidó el ¡ea!, su fatalismo y los complejos, peleó por lo que era de justicia, soñó y apostó por sí misma, por sus fuerzas... y lo consiguió. Álvarez-Cascos tuvo el mérito de cambiar el trayecto, de escuchar y de pactar, tuvo olfato político y debemos reconocérselo y agradecérselo (en segundo lugar el mérito es suyo personal). ¿Y el PP? el segundo PP, el de Álvarez-Cascos, también, pero no así el del primer PP, el de Arias-Salgado, que apostaba por la España radial clásica que ningunea a todas las ciudades castellanas intermedias y que desde el s XIX nos ha llevado a la postración.
Manifestación pro AVE por Cuenca.
Podría decirse que al PP, por rectificar, también le corresponde la medalla, pero más concretamente a Álvarez-Cascos. ¿Y al PSOE? el PSOE se lo encontró todo hecho, aprobado, decidido, en construcción,... solo se limitó, por una cuestión de tiempo, a concluir el tramo final. Lo difícil, y decisivo, fue el momento inicial, cuando no estaba ni garantizado el trayecto capitalino conquense.
Estación del AVE de Cuenca.
Conclusión: cuando una ciudad pequeña cree en sí misma, cuando planta cara a sus teóricos representantes, puede revertir su futuro. Ahora, ya conseguido el AVE, es hora de recobrar ese espíritu reivindicativo y trasladarlo a otros ámbitos también de gran interés: paremos al trasvase Tajo-Segura por ser un expolio permanente a Castilla, reivindiquemos regadíos y futuro aquí, no en la periferia, defendamos la línea de tren convencional como línea de mercancías entre el puerto valenciano y el gran Madrid, apostemos por la vuelta a Cuenca de la comarca de Utiel-Requena, dejemos claro que la sede de la Confederación Hidrográfica del Júcar debiera estar en la única ciudad importante por la que pasa el río (Cuenca) y desdoblémosla del Túria (río independiente)... unámonos al proyecto de restaurar la unidad política de todas las provincias de Castilla, en una única comunidad autónoma, a la cual nadie pueda ningunear ni política ni económicamente. La reunificación castellana es posible y deseable, tiene sentido histórico y geográfico y podría hacerse con un reparto de consejerías e instituciones por todas las capitales de provincia. Es cuestión de creer en nosotros mismos.

Crónica de un logro

(Elaborado con información de la bitácora de J.L. Collada: http://elcronistaindependientedecuenca.blogspot.com/)

1.- El Gobierno de Felipe González (PSOE) no incluyó en el Plan Director de Infraestructuras (PDI) 1992-2007 el AVE Madrid-Valencia por Cuenca. Sí el ‘AVE descafeinado’, por no ser directo, Madrid-Valencia por Alcázar de San Juan y Albacete, a propuesta del entonces ministro de Obras Públicas y Urbanismo, el catalán Josep Borrell.

2.- José Madero, diputado por Cuenca a la sazón, preguntó en el Congreso sobre la posición del Gobierno en el trazado del AVE, y la no inclusión en el documento definitivo del PDI de la ciudad de Cuenca, recibiendo del ministro Borrell (PSOE) la siguiente respuesta: ‘el Gobierno no está para realizar obras faraónicas entre cordilleras insalvables’. Bien clarito lo dijo.

3.- José Bono (PSOE), presidente casi eterno de CLM, apoyó el trazado del AVE por Alcázar de San Juan y Albacete, hasta el Martes Santo del año 1999, cuando una comisión de la Plataforma Cívica por Cuenca (PCC), le presentó el trazado por Cuenca que con anterioridad había propuesto a Ferreros y Cenzano (sin que fueran capaces de llevarlo más allá de los límites conquenses)

4.- El primer Gobierno de José María Aznar (PP), sin mayoría absoluta, se encontraba, en parte, secuestrado por los intereses catalanistas, y con un Ministerio de Fomento dirigido por Rafael Arias-Salgado genuflexo a los intereses de CiU, que cobraba su precio a través de hombres como Albert Villalta o Manuel Niño (eterno enemigo de Cuenca, tanto en la época de la autovía A3, cuyo trazado tampoco incluyó a Cuenca capital, como después con el AVE, e incluso con la ubicación de la estación, a decir de no pocos conquenses) en ese momento en la secretaría de Estado de Fomento, y anteriormente consejero de la Generalidad catalana.

5.- El empresariado y la clase política levantina, tal y como sucedió con la A3, se conformaban con disponer del AVE a Madrid cuanto antes, aunque fuera el peor de los trazados posibles, el menos directo. Recordemos cómo en su día, el presidente pancatalanista valenciano del PSOE, Joan Lerma, llegó a declarar que la A3 debiera construirse algo más al sur de Motilla del Palancar, como finalmente consiguió,  ‘para así aprovechar el trazado para ir de Valencia a Sevilla también’ considerando que las autovías no son para todo el mundo, en referencia a Cuenca capital, cuya función era ‘cuidar el campo y mantener el aire sano’, afirmó con descaro al tiempo que aseguraba que el Estado ‘solo debe invertir en las seis o siete ciudades principales del país’.

6.- El ministerio de Arias-Salgado, llevado de la mano de Albert Villalta y el interés del catalanismo, pretendía decidir el trazado por Alcázar de San Juan y Albacete, y conseguir así que el eje Madrid-Valencia no desplace al Madrid-Barcelona como primero del país, y sitúe a Valencia como rival de Barcelona (cosa que quedó evidenciada en la prensa catalana años antes cuando se inauguró el cierre de la A3 en Contreras puesto que temieron perder centralidad y la condición de segunda ciudad de país a medio plazo). Además se pretendía construir un falso AVE, una suerte de Alaris por una vía ligeramente mejorada y punto. Valencia no merecía más.

7.- La Plataforma Cívica por Cuenca, según cuentan sus promotores, asume que ‘lo que interesaba era frenar las intenciones de Arias-Salgado y CiU y esperar tiempos electorales mejores en el que el Gobierno se liberara del nacionalismo’.

8.- El trazado por Cuenca se incluye por primera vez en el Estudio Informativo que sale a exposición pública en el BOE del 16/12/1999.

9.- Reunión de la PCC con el consejero de Infraestructuras de la Generalidad valenciana, José Ramón García Antón (PP), quién recibió en ese momento una llamada telefónica, según cuentan los asistentes, de la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá (PP), para preguntarle al consejero por el rumbo que llevaba la reunión, a lo que le contestó, ‘enhorabuena Rita, porque estos chicos de Cuenca van a conseguir que el AVE vaya por donde tú quieres’. Al parecer también trataron de los beneficios del ferrocarril convencional por Cuenca y la necesidad de trabajar por su modernización y utilización para mercancías.

10.- La PCC convocó dos manifestaciones, en Valencia y Madrid, y se prepararon 15 alegaciones al estudio informativo (el encargado de su elaboración fue el médico Antonio Melero) que fue rubricado por más de 15 mil conquenses, tanto de la provincia como emigrados, cuya firma pudieron plasmar en las Casas de Cuenca de Madrid, Valencia, Barcelona y Alicante. El Ministerio de Fomento recibió más de 66 mil alegaciones, que pararon el  proceso que nos conducía a quedarnos sin AVE por Cuenca (tal y como unos meses atrás parecía inevitable), a repetir la historia de la autovía A3, y a dejarnos, de nuevo, aislados pese a estar en medio de la península, y sin ninguna posibilidad futura de desarrollo.

11.- En las elecciones de 2000, Aznar (PP) consiguió la mayoría en el Congreso y la libertad para decidir con justicia y con razón, el trazado más conveniente a los intereses generales de país que no era otro que la línea recta. En junio de 2000, pocos meses después de que Aznar renovara como presidente del Gobierno, y depuesto ya Rafael Arias-Salgado (de triste recuerdo en Cuenca), sustituido por Francisco Álvarez-Cascos, se produce un acontecimiento en el Congreso que sería premonitorio del cambio de  destino de los conquenses. Álvarez-Cascos anuncia ante la Comisión de Infraestructuras del Congreso de los Diputados la nueva postura del Gobierno con respecto al trazado del AVE Madrid-Levante. El Ministerio presentaba el trazado ‘A modificado’, el AVE por Cuenca capital, al tiempo que declaraba: ‘Nunca en la historia de la administración española había existido un proceso administrativo como éste en la defensa del AVE por Cuenca, en el que los ciudadanos habían presentado decenas de miles de alegaciones’. Una frase para la posteridad que deja claro a quien se debe el flamante AVE por Cuenca, al pueblo organizado en torno a la Plataforma Cívica por Cuenca.

12.- El 8/01/2001, se reúnen en Murcia el ministro del ramo y los cuatro presidentes autonómicos implicados (Madrid, CLM, Comunidad Valenciana y Murcia), que respaldan el nuevo trazado presentado por el Gobierno. Cuenca había ganado, la sociedad civil conquense había sido clave. A todos los que lo hicieron  posible, gracias.

7 comentarios:

  1. increible Cuenca una ciudad la mitad que mi pueblo con ave y autovia viva la imbecilid y provincianismo chusquero

    ResponderEliminar
  2. ¿A que jode? pues ale nene, a darse con la cabeza en la pared. Igual tu pueblo está como está porque son todos como tú.

    ResponderEliminar
  3. Para el Anónimo 1. No fuimos los castellanos ni de Cuenca ni de ninguna otra ciudad pequeña o mediana quienes pedimos el AVE sino Sevilla, Barcelona, Valencia, etc. Lo que aquí se pedía era que SI NO PARA, NO PASA, SI HA DE HACERSE POR AQUÍ QUE SEA TENIÉNDONOS EN CUENTA, Así de simple. Nunca hemos justificado en Cuenca el AVE en nuestro tamaño, sino en que no queremos ser territorio de paso obligado sin que nos pregunten, sin que nos tengan en cuenta, pedazo imbécil,... tú si que eres provinciano, una sucia rata probable habitante de una sucia urbe junto a una gran ciudad, ¿Barcelona tal vez? es que se os huele.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Este comentario ha sido eliminado por un administrador del blog.

      Eliminar
    2. Si no eres el del comentario 1 ¿por qué te das por aludido, a qué vienen esos insultos contra todo un pueblo?

      Eliminar
  4. Mira quién habla... ¿porque el mensaje de Javier Martínez no lo váis a borrar verdad?

    ResponderEliminar
  5. Efectivamente, ese mensaje no se va a borrar, lo contestado es en defensa propia y proporcional a lo anteriormente escrito. Donde las dan las toman, amigo.

    ResponderEliminar

Nuestros lectores tienen mucho que decir. A través de este formulario puede hacernos llegar sus comentarios para que sean publicados. Sé respetuoso y constructivo.
La bitácora no se hace responsable de las opiniones de los usuarios y se reserva el derecho a extractar o no publicar los contenidos que reciba.