Según informa Levante (14/06/2012), el Gobierno español opta por interpretar a su antojo, y con claro sesgo favorable hacia la Comunidad Valenciana, las sentencias del Tribunal Supremo sobre el reparto competencial del territorio del Júcar que enfrenta desde hace años a este trozo ninguneado de Castilla (y que algunos tuvieron la ocurrencia de llamar CLM), con Valencia (la niña bonita del Estado como buena periférica que es).
"El Gobierno español opta por interpretar a su antojo, y con claro sesgo favorable hacia la Comunidad Valenciana, las sentencias del Tribunal Supremo sobre el reparto competencial del territorio del Júcar"
Así, el digital valenciano informa que el gobierno ‘opta por mantener la unidad de cuenca en el Júcar’ pese a que es notorio que el río Turia, el Palancia, el Cenia, y un largo etc., no son afluentes del Júcar, son otras cuencas hidrográficas distintas, independientes (como existen otros casos en la península, que sí se recogen con una demarcación con gestión apartada, caso por ejemplo, de las cuencas del norte de Cataluña, que no pertenecen al Ebro), y cuya inclusión en ésta sirve para aumentar territorio y población y entregar así, ad eternum, la gestión del río Júcar a los valencianos perjudicando a los castellanos (con mayor territorio y aportación hídrica al río), que somos, como de costumbre, restospañoles para el Estado periferista.
Recordemos que por la capital del Turia, Valencia, el Júcar ni pasa, por lo que correspondería a Cuenca capital (la única ciudad importante por la que sí discurre directamente el río), la sede de la Confederación Hidrográfica, con todo lo que eso supone de inversiones y empleo público estable y cualificado además de poder económico, administrativo y político para la ciudad.
El Consejo Nacional (sic) del Agua aprobará un decreto que privilegia (sic) los intereses valencianos.
El Consejo Nacional (sic) del Agua aprobará un decreto que privilegia (sic) los intereses valencianos.
La propia prensa valenciana así titula, así lo admite y lo celebra ya, la misma que torpedea un día sí y otro también el corredor central ferroviario de mercancías (Algeciras-Madrid-Zaragoza-Travesía Central del Pirineo-París, con un ramal Lisboa-Alcázar de San Juan), llamado a ser la última oportunidad de desarrollo del interior castellano. Y es que solo para temas hídricos (y para endiñarnos el ATC), la prensa catalanista valenciana sí es españolísima. Para lo demás, es profundamente anticastellana.
‘El Consejo Nacional del Agua se reunirá en los próximos días para aprobar, con toda probabilidad, el texto de un real decreto que mantiene la demarcación Júcar con la misma estructura territorial de la actual Confederación Hidrográfica del Júcar. El texto elaborado por el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente pretende resolver las controversias surgidas entre Castilla-La Mancha y la Comunidad Valenciana en los últimos años y dar una salida a las diferentes interpretaciones del Tribunal Supremo sobre el reparto competencial del territorio Júcar’. Informa el citado diario previa interesada filtración. Salida que será favorable, únicamente, a los intereses de los valencianos.
Así, la prensa levantina informa sin tapujos: "la opción del ministerio consiste en trasladar la actual estructura territorial de la Confederación Hidrográfica del Júcar a la 'demarcación' Júcar de modo que se privilegian los intereses valencianos al mantener una mayor representatividad -fruto de su mayor participación territorial y poblacional en la cuenca del Júcar- en detrimento de Castilla-La Mancha, que aspiraba a incrementar su poder en el río Júcar mediante la parcelación de la actual cuenca hidrográfica" ¿No es esto una vergüenza señor Rajoy?, ¿desde cuándo tiene Valencia una mayor participación territorial en el Júcar? Yo se lo diré, desde que sumaron el Turia, el Palancia, la Albufera, etc., ríos independientes del Júcar.
“El real decreto abre la puerta a que tanto la Comunidad Valenciana como CLM asuman las competencias sobre sus cuencas internas, adscritas ‘provisionalmente’ a la Demarcación Júcar que preside Mª Ángeles Ureña, aunque parece harto improbable, ya que se trata de ramblas y barrancos casi sin agua en el caso valenciano y en el caso de Castilla-La Mancha de la cuenca endorreica de Pozohondo, sin cauces definidos. En la práctica, el real decreto supone que la cuenca del Cenia se mantiene íntegramente dentro del Júcar y que la cuenca propia de la Albufera se integra también en el Júcar, y no como una cuenca autónoma, como pretendía Castilla-La Mancha. Tampoco se producirá la división del subsistema Vinalopó-El Alacantí que incluían los borradores elaborados por el Gobierno Zapatero”. Es decir, Valencia consigue sumar territorios y población que no pertenecen a la cuenca del Júcar para hacerse con el control político efectivo del río.
"Valencia consigue sumar territorios y población que no pertenecen a la cuenca del Júcar para hacerse con el control político efectivo del río"
Y es que señores, en este chapucero Estado autonómico, diseñado para mayor gloria de la periferia, lo de los peris es solo de ellos pero lo nuestro, lo castellano, es de todos los españoles… porque así les conviene, y si sacan más de otra forma, pues cambian el criterio y listo. Ellos eligen, nosotros no. Los periféricos, abreviadamente los peris, pueden, si lo desean y les conviene, gestionar sus ríos mientras los nuestros son de todos o incluso también son de ellos. Véase lo ocurrido con la transferencia del Guadalquivir donde Castilla la Nueva y Extremadura, que también tienen territorio en el río, han sido ninguneadas. ¿Porqué no transferir el Júcar, nuestra parte, a Castilla? Ah no, eso no; esto es España, 'el agua de los ríos es de todos' nos machacan una y otra vez los interesados de allí y los idiotas de aquí. ¡Y una mierda es de todos! Nuestra parte es nuestra. ¿Verdad que a los portugueses no les dejamos mandar en los ríos comunes, pese a que son históricamente tan españoles como los valencianos? Autonomías sí, claro que sí, pero no así; autonomía de verdad en las cosas verdaderamente importantes que afectan al territorio (infraestructuras, agua, patrimonio, etc.), y Estado fuerte en aquellas otras que nos igualan en derechos (Educación, Sanidad y Justicia) y deberes (Hacienda). Eso de que solo por el interés de quiero Andrés, señores peris, ha de ir acabándose. Las asimetrías para su padre.
“Esta distribución permite mantener 10 representantes de origen valenciano en el Consejo del Agua de la Cuenca por 9 procedentes de otros territorios. En la Junta de Gobierno se amplia de 5 a 7 los representantes de los regantes lo que permitirá, probablemente, la entrada de los regantes de aguas subterráneas de La Mancha, actualmente ‘invitados’”. ¡Manda huevos que los castellanos de la comarca manchega seamos invitados! ¿Y saben de dónde proceden los 9 representantes de 'otros territorios'? porque no crean que son todos castellanos, también están incluidos ahí los aragoneses y hasta un catalán. ¡Asco de país!
Río Júcar cerca de su nacimiento, en las inmediaciones de Tragacete (Serranía de Cuenca, Castilla)
"Esta distribución permite mantener 10 representantes de origen valenciano en el Consejo del Agua de la Cuenca por 9 procedentes de otros territorios"
“El nuevo real decreto facilitará la aprobación del nuevo Plan Hidrológico del Júcar” que será, como era de suponer, una tomadura de pelo para los intereses castellanos, como toda la vida, oigan. ¿Alguien sabe para qué queremos al PPSOE en Castilla? ¿Qué piensan hacer la señora Cospedal, el señor Ávila, Prieto, Pardo, Barreda, Bono, Guijarro, García-Page… y toda la banda del PPSOE? A una Castilla reunificada y unida, con políticos mínimamente castellanistas, no se le tomaría el pelo de esta forma tan humillante, ni siquiera se atreverían a expoliarle su oro líquido, el agua. No puede ser que el criterio demográfico sea, en la práctica, el método a través del cual tu vecino se cree con derecho de mandar en tu territorio y en tus recursos. El Estado, una vez más, apuesta, exclusivamente, por la periferia, prima y sacrifica a Castilla... y luego van, y nos llaman centralistas, como si la centralidad geográfica importase algo frente al periferismo legislativo-político.
El Estado saltándose los límites y la lógica de la Naturaleza para beneficio de la mafia especuladora costero-ladrillero-naranjera y sus insostenibles campos de golfos y parques acuáticos, para engordar aún más una economía dependiente de un recurso que ni tienen ni están dispuestos a pagar, y que después de habérnoslo expoliado con la aquiescencia del Estado periferista, incluso subvencionamos nuestro propio expolio. ¿Por qué no pagan los peris de una vez por el agua expoliada un precio justo, su valor real?, ¿nadie ve la descomunal deuda histórica que nos deben?, ¿por qué se enterraron los planes de regadíos en La Manchuela? Doblemente patético el apoyo que la coalición ecolojeta-independentista valenciana eQuo-Compromís hizo de los trasvases-expolios de agua castellana (Tajo y Júcar) en la pasada campaña electoral del 20/11/2011, al tiempo que se oponen oficialmente a los nuevos trasvases desde el Ebro.
"Incluso subvencionamos nuestro propio expolio. ¿Por qué no pagan los peris de una vez por el agua expoliada un precio justo, su valor real?, ¿nadie ve la descomunal deuda histórica que nos deben?"
Mientras en el resto del mundo civilizado la gestión tiende hacia una mayor transparencia, una mayor justicia territorial y explotación racional (perdurable en el tiempo) de la naturaleza en general, y de los ríos en particular, aquí vemos cómo el Estado periferista nos asigna a los castellanos el papel de segundones, de lugar de paso, de sitio para ser explotado por la periferia plácidamente, de colonia interior a la que succionar gratuitamente recursos, el papel, en definitiva, de Restospaña. Y hay que decir basta.