Reunificación de Castilla: febrero 2013

Noticia aparecida en Alerta Digital (21/02/2013)

El denominado "Campo de Reeducación Nacional Joan Fuster" (padre ideológico del catalanismo en Valencia) deja a las claras cuál es la ideología de los autores del blog: el catalanismo. También puede leerse: 'Saludamos y juramos fidelidad a las fuerzas de nuestros superiores naturales y morales: castellanos nacemos, al servicio de los valencianos morimos'.

Por su interés, reproducimos íntegramente la noticia aparecida en Alerta Digital el 21/02/2013:

“Hay en la Patria (valenciana) una serie de problemas a los que hay que dar solución. El principal es el de la etnia castellana, envenenando, parasitando la tierra. Estos son algunos de los males que nos han traído los castellanos: griterío, decadencia de las buenas maneras, exposición de los niños a una lengua semi-tribal, enfermedades como el ébola (fiebre hemorrágica típica del África negra), SIDA, herpes…”. Lindezas como ésta aparecen publicadas en la página Ofensiva valenciana, que sus responsables llaman “el blog del ultranacionalismo valenciano ultraclasista”.

El blog es todo un recopilatorio de opiniones incendiarias y de fotografías mayoritariamente de contenido bélico. Entre todos los asuntos que se tratan hay sin embargo uno recurrente: la reclusión de los castellanos en campos de reeducación. En una de las perlas publicadas se aboga por respuestas violentas al ‘delito’ de la castellanización.

El summum de la idioticia tras años de adoctrinamiento democrático lo alcanza el siguiente párrafo: “Cuando estalle la inminente guerra valenciano-castellana, nosotros dispondremos de hogares donde poder aplicar severos correctivos con objeto de corregir la mencionada entidad antropomórfica (sic). Estamos hablando, obviamente, del Campo de Reeducación Nacional (CNR), que se construirá en cada comarca (las que sobrepasen los 600 mil habitantes tendrán que tener dos como mínimo, según el escalado del Centro Político-Militar Valenciano (CPMV)”.

Y para que los castellanos se hagan una idea de lo que les espera con estos estrafalarios discípulos de Lavrenti Beria, el jefe de la Policía de Stalin, se ilustra el ‘vómito literario’ “con la imagen gloriosa de los campos donde los castellanos podrán dignarse un día, si se esfuerzan, en ser seres humanos”.

Al final, los viejos de la canción de ‘Jarcha’ llevaban razón.